En una sociedad cada vez más exigente, la apariencia juega un papel fundamental para cualquier tipo de oportunidades, ya sea personales o amorosas así como profesionales, por lo que buscar la forma de siempre lucir bien es una tarea casi que obligatoria. Aunque la mayoría de aspectos son fáciles de resolver, hay otros que requieren de una ayuda extra, por lo que la cirugía plástica Bogotá es una buena opción.
Si buscamos la definición exacta de lo que es este término científico, encontraremos que se trata de una especialidad de la medicina que tiene como objetivo principal corregir y mejorar aquellas anormalidades que pueden darse por desórdenes congénitos, algún anomalía adquirida, involutiva o tumor que requieren de algún mejoramiento de la forma física y su función.
Por medio de la cirugía es posible reconstruir aquellas deformidades presentes y proporcionar una mejor función trasladando tejidos que hagan parte del mismo cuerpo, con una gran diversidad de técnicas, la colocación de implantes biocompatibles ya sea para mejorar el soporte o la función relacionada con el movimiento. También es muy común incorporar ambas técnicas.
Dentro de los avances más significativos de la cirugía plástica Bogotá se contemplan los tejidos donantes, que se usan como unidades completas para ser colocadas en áreas donde se ha perdido el tejido o que necesitan de una nueva reserva, donde en los casos más comunes, se utilizan en la cara y en las manos.
La finalidad de esta especialidad es que en efecto, el paciente que ha nacido con algún tipo de defecto o que ha sufrido un trauma que haya comprometido no sólo la estética sino también su funcionalidad para que pueda alcanzar la mayor normalidad en ambos aspectos. Esto es algo en lo que muchos no se enfocan cuando piensan en las cirugías estética, que también existen casos donde es estrictamente necesario realizar un procedimiento como este, más allá de cuestiones superficiales.
La cirugía plástica Bogotá tiene muchas aplicaciones y nuestra ciudad cuenta con grandes instalaciones para lograr la realización de procedimientos completamente seguros y confiables donde el paciente obtendrá los resultados que desea sin preocuparse por su salud y bienestar. Dicho esto, la aplicación más conocida además de la estética, el sobre el procedimiento reconstructivo, en donde un paciente por diferentes causas no cuenta con una fisionomía normal y debe ser atendida y reparada lo antes posible, para garantizarle al paciente una vida normal y un desarrollo en sociedad más que integral.
Pero claramente también se incluyen las intervenciones a esos pacientes sanos y estables emocionalmente que desean mejorar su apariencia física ante cualquier inconformidad que tengan con su aspecto. Frente a esto, los avances en la cirugía han ocasionado que las formas sean lo más naturales posible, cercana a la estructura natural del órgano para evitar resultados muy fuera de la proyección del cuerpo del paciente, dejando atrás todo concepto de que la cirugía sólo puede resolver temas de funcionalidad y no de estética.
Se preguntarán entonces, ¿de dónde surge la necesidad de las personas que aparentemente o a simple vista no requieren de ningún cambio? Pues las respuestas pueden ser muchas, pero la mayoría están relacionadas con la autoestima del mismo paciente que considera que es menos atractivo o agradable para los demás por la forma que tiene su cuerpo o el área que desea corregir. Esto casi siempre está relacionado con algún tipo de maltrato psicológico que pudo sufrir el paciente en su niñez o adolescencia, por burlas ocasionadas por su aspecto. Ejemplo de esto son las personas que por naturaleza tiene una nariz u orejas prominentes y que fueron ovejo de chistes en más de una ocasión.
Sucede entonces, que cuando ya tienen la edad para decidir cambiar su apariencia, comienzan con un proceso para dejar atrás aquella imagen que tantas biras recibió, para convertirse en algo que sea más aceptable para sí mismos. Siempre que atendemos estos casos, procuramos hablar con los pacientes para que sepan que un procedimiento con este les ayudará en gran mediad a sentir esa comodidad que les hace falta, pero que es necesario que la decisión la tomen consciente por ellos y no por conseguir la aceptación de los demás, pues una vez intervenida el área no podrá regresarse a su estado original.
Otra de las razones por las cuales un paciente quiere cambiar su apariencia se relaciona con las exigencias que como sociedad se han creado en cuanto a la imagen que debe tener una mujer y un hombre. En el caso de las damas es usual ver figuras muy estilizadas con senos de buena proporción y una cintura que sea pequeñas pero acorde con su cuerpo, que además tengan un buen derrier, para crear lo que todos conocen como “figura de guitarra”. En el caso de los hombres su tonicidad muscular es lo que más cuenta y entre más pueda marcar su cuerpo, se verá más atractivo. Sin embargo es importante que no pierda de vista que debe embellecerse para usted mismo y no para los demás.
Sin importar cuál sea el área que desea mejorar o cuál sea el procedimiento que desea realizarse, lo más importante es que se pueda acercar a verdaderos profesionales en cirugía plástica Bogotá que puedan ayudarlo a lucir como usted realmente desea, entregándole resultados más que satisfactorios que los hagan sentir mejor consigo mismo y que puedan ayudarlo a recuperar en gran medida la funcionalidad que haya perdido bajo cualquier circunstancia. Si desea realizar una valoración de caso y de cuál sería su plan de cirugía, por favor póngase en contacto a través de nuestras líneas telefónicas o por medio de nuestro correo electrónico.