La búsqueda de la perfección del cuerpo es algo que se remonta a tiempos pasados, donde culturas antiguas creaban rituales específicos para conversar su figura, juventud y lozanía, considerándolo como una práctica más que obligatoria. En la actualidad no ha cambiado mucho esta situación, pues de igual forma se siguen buscando los métodos para lucir un cuerpo y piel envidiables, de acuerdo con los cánones de belleza establecidos por la sociedad.
Es por ello que en busca de la perfección y de conseguir una imagen saludable que refleje el cuidado por su apariencia, muchos hombres y mujeres se someten a procedimientos estéticos que les permitan llegar a obtener estos resultados. Uno de ellos, claramente de los más solicitados, es la liposucción, dado que puede lograr que la persona consiga una figura más que sensual y que genere un impacto positivo en su vida y en la forma en cómo la perciben los demás.
Este tratamiento, como algunos ya sabrán, consiste en la eliminación del exceso de grasa a través de un aparato de succión, que logra extraer en gran medida esta sustancia orgánica alojada en el tejido adiposo del paciente, para que pueda obtener una figura mucho más moldeada, con una cintura más pequeña (en el caso de las mujeres) y con un abdomen más plano.
Por lo general es un procedimiento que toma de 2 a 4 horas, dependiendo de la cantidad de tejido graso, por lo que se considera una cirugía ambulatoria, que no le genera mayor tiempo de incapacidad al paciente, sin superar las dos semanas. No es un tratamiento complejo o muy invasivo comparado con otros procedimientos como por ejemplo la abdominoplastia y no se considera un método efectivo para perder peso, pues éste sólo cumple con la función de mejorar la forma y apariencia de la zona abdominal o donde se realice el procedimiento.
Si bien queda claro que esta cirugía no le ayudará a obtener su peso ideal, pues sólo se encarga de eliminar la grasa, es importante que el paciente reconozca que su cuerpo no quedará sin un rastro de esta sustancia, pues a pesar de que estéticamente su acumulación pueda llegar a ser muy molesta, nuestro cuerpo la necesita para obtener la energía requerida para funcionar. Dejar al cuerpo sin esta fuente sería peligroso para la salud. Así que cuando acuda al profesional vaya con expectativas reales y no se haga ideas equivocadas.
La liposucción puede ayudarle a conseguir esa figura que tal vez con sólo el ejercicio no ha podido lograr y que a pesar de hacer grandes esfuerzos, no se evidencian los resultados. Sin embargo, y como el título lo indica, más allá de describir el procedimiento y las razones por las cuales una persona decide realizarse una cirugía como esta, el día de hoy queremos poner en consideración de todos los que están pensando en un procedimiento como este, algo que deben tener en cuenta antes y después de la intervención.
Si considera que este es el procedimiento que puede ayudarle a lograr los resultados que no ha conseguido por sí mismo, es fundamental que antes de hacerlo haga un compromiso con usted, en donde se prometa conservar los resultados finales cambiando por completo sus hábitos alimenticios y diarios, para garantizar que no volverá a tener exceso de grasa en su cuerpo. Por ello y en este mismo orden de ideas, después de la intervención su prioridad número uno será cuidar de usted y su nuevo cuerpo.
No vale la pena, como se lo he explicado a muchos de mis pacientes, que someta su cuerpo a un procedimiento que claramente le dará los resultados que busca pero que implica un proceso de recuperación corto, en donde se pueden presentar algunas molestias, dolores o moretones, algo muy normal en la liposucción y cualquier otro procedimiento estético. ¿De qué sirve exponer su cuerpo a esto, si a la final no va a tener el compromiso y responsabilidad de cuidar de él?
La dieta es uno de los factores claves para que los resultados se mantengan durante mucho tiempo, pues no hay otra forma de hacer que la liposucción realmente valga la pena. Es muy importante que luego de que termine con su recuperación, le pregunte a su médico cuál será la mejor dieta para usted que sea acorde a su peso, estatura y las necesidades de su cuerpo. Lo sugerido siempre será:
- Disminuir o eliminar el consumo de grasas trans o saturadas de su dieta.
- Nunca dejar de comer, pues esto siempre produce un efecto rebote.
- Incluir mucha fruta y verdura, sobre todo aquellas que se consideran diuréticas.
- Eliminar las bebidas gaseosas y reemplazarlas por jugos naturales bajos en azúcar.
- No limitarse a dejar de comer lo que le gusta, pero hacerlo en su justa medida.
Como puede ver no sólo es importante tomar la decisión de realizarse una liposucción, sino también tener presente que como paciente ahora debe asumir responsabilidades para conservar los resultados otorgados por el mismo procedimiento. El profesional no es el único que debe velar por su tratamiento, sino que usted también debe hacerlo y comprometerse a mantener la nueva figura que se le ha dado. Recuerde que si tiene inquietudes sobre otros aspectos claves de este procedimiento puede navegar a través de mi página web y encontrar otros artículos como este, que puede ayudarlo a resolver sus dudas.
Si no es así, puede ponerse en contacto directo conmigo a través de los números que se encuentran en la sección de contactos.